lunes, 18 de diciembre de 2023

EL MAESTRO QUE PROMETIÓ EL MAR

 EL MAESTRO QUE PROMETIÓ EL MAR

Patricia Font, 2023


El estado de la memoria histórica no está muy bien en nuestro país. Todavía cuesta hablar de los asesinatos franquistas y esta película cuenta uno de tantos a un maestro. Está basada en nuestra realidad, lo que vemos en la pantalla refleja el trabajo vocacional de miles de españoles y españolas en su afán por educar a la población donde quiera que esta estuviera, así fuera en un pueblecito de Burgos en el año 1.935, ese lugar que es cualquier otro lugar de nuestra tierra, plagada de fosas con cuerpos de inocentes, tan solo es un ejemplo, un caso de miles. Hombres y mujeres en medio del campo, en cunetas, cerca de cementerios, o en no se sabe dónde. Un maestro de un pueblo de Tarragona que le tocó ejercer en un pueblo de Burgos. Allí aplicó pedagogías novedosas y enseñó maravillas a niñas y niños cuyas familias no sabían leer ni escribir.

La tarea de sacar a la luz los huesos de los fusilados para identificarlos es muy lenta, y se obstaculiza desde ciertas instituciones afines al franquismo, que haberlas haylas todavía. Es un asunto del que nadie quiere hablar en ningún momento, en casi ningún lugar. Menos mal que esta película puede ser la excusa para hacerlo, creo sinceramente que es necesario saber la verdad.

Una asociación de un pueblo de Burgos contacta con la de la Memoria Histórica y realizan excavaciones de fosas franquistas sacando bastante material identificable con ADN de familiares, empeñados en descansar alguna vez de ese dolor que se llama injusticia, olvido y desprecio.

Una joven barcelonesa llega poco antes de que la excavación acabe y consigue encontrar noticias de su familiar, bisabuelo materno, porque estuvo en ese pueblo y vivió con un maestro que enseñaba a las niñas y niños a realizar cuadernos, imprimirlos, intercambiarlos con otros colegios y países, y quiso llevarlos a ver el mar Mediterráneo. Las vidas cruzadas en el tiempo de la joven de 2010 y del maestro de 1935 componen la trama que transcurre en el mismo espacio.

Ir y volver al pasado sirve para relacionar causalidades y efectos.

El golpe de estado de 1.936 impidió el progreso, la cultura, las posibilidades de tanta gente que tendríamos que hacer lo posible para saberlo y para que no se repitiera ni de lejos. El fascismo asesino se llevó a maestros y maestras republicanas, rurales, capaces de abrir mentes con libros, dibujos, excursiones, juegos, teatros, que habrían supuesto avances en todos los campos del saber si hubieran podido continuar más allá de cinco años (Asi que pasen cinco años, escribía Lorca en 1.931, cinco años antes de que lo asesinaran. Todavía no sabemos dónde están sus restos).

Nadie que se dedique a cualquier nivel de docencia puede salir del cine sin emocionarse. Yo tuve que suspirar hondo varias veces para poder hablar, como la mayoría de la gente que estaba en la misma sala y guardaba silencio, incluso cuando se encendieron las luces y nos dirigimos a la salida.

Mantener el miedo, amenazar, surte efecto entre la población pacífica. Torturar al maestro, exhibirlo en la plaza y dispararle un tiro en la nuca, eran actos repetidos a diario, actos de barbarie, violencia e inhumanidad, tan brutales que dejan desarmados a cuantos están en contra, los silencian, los humillan, los domestican para que sirvan al poder golpista a base de soportar escarnios.

Esta película, al rendir homenaje a las personas defensoras de los valores más elementales de la democracia, repara un poco el olvido y la ignominia, nos hace sentir algo de justicia y reparación, las que no tuvieron las víctimas reales, sus familiares más directos. Parece que al llorar cuando matan al maestro lloramos por todas las demás asesinadas y acompañamos en el sentimiento a tanta gente, muchos menores, que nunca tuvo consuelo ni apoyo sino todo lo contrario.

Gracias al cine podemos recuperar la memoria histórica y entendernos mejor. Gracias a este tipo de cine nos acercamos a lo que también nos hace humanos, el reconocimiento de los genocidios y el valor de impedirlos siempre. Mi más sincera enhorabuena a la directora por realizar esta obra.

El elenco de actores, las localizaciones, el guion, la música, todo el trabajo artístico y técnico ayudan a que sintamos mejor la historia real. Nuestra sociedad no es amnésica, esto debe tener consecuencias en el presente y tener claro desde todas las instancias de poder que no debemos permitir otro 36.


domingo, 10 de diciembre de 2023

SUBTEXTOS...MILLAS

 SUBTEXTOS...MILLÁS


La conversación de esta mañana entre Javier y Juanjo sobre la fragilidad y la vulnerabilidad como aspectos humanos cotidianos frente a la eficacia, la dureza y la productividad de nuestro contexto ha sido sencillamente pura descripción de la vida.

Necesariamente ha tenido que referirse el escritor a Gaza, a los hospitales bombardeados por Israel porque hoy, cualquiera que mencione un hospital, por el motivo que sea, pero especialmente porque lo esté usando como paciente, valora y aprecia el trabajo insustituible de los hospitales para la normalidad de la vida, cuanto ni más para la vida en guerra.

Resulta paradójico y trágico que hoy, precisamente, se cumplen 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, impulsada por Eleanor Roosevelt, esposa del entonces presidente norteamericano, país que se ha opuesto a el alto al fuego en Gaza con su veto en la ONU.

Parece que los Derechos Humanos también están amortizados, como Millás en los subtextos que le parece apreciar en los médicos cuando anteponen su edad a cualquier alivio definitivo de sus enfermedades. Esos sesgos, racistas, machistas, edadistas, están presentes hoy en la celebración de la efemérides de los DDHH, además de económicos, armamentísticos y de prestigio internacional.

Qué antagónico hoy el programa de radio con la realidad, la reivindicación del derecho a ser frágiles, vulnerables, a prestar atención al cuerpo, a no ser duros que ha dicho el escritor, contrasta con la dureza de la mano levantada del responsable de EEUU, en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, para manifestar su veto contra el alto al fuego en Gaza.

Si tuviéramos que contestar a la enfermera de Millás sobre qué puntuación le damos entre 1 y 10 a el estado del mundo hoy no tendríamos ningún reparo, más que el de la vergüenza, en admitir el suspenso.

¿DÓNDE ESTÁ ELEANOR ROOSEVELT?

 10 DE DICIEMBRE DE 1948, PARÍS, ONU


El veto de EEUU a un alto el fuego en Gaza elimina todo el trabajo y toda la esperanza de esta imagen. El trabajo porque fue fácil acordar 30 artículos que defendieran la Igualdad, la Libertad y la Dignidad de todas las personas después de la II Guerra Mundial. La esperanza porque aunque se sabía que eran una utopía podían servir para orientar el camino de la gobernanza global que, de una u otra manera, realizan todos los países a la vez en una globalización cada vez más dependiente e injusta.

Hoy es el 75 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos y las democracias que los impulsaron son máquinas de guerra dirigidas a causar terror y más inhumanidad de la que se causó con la Alemania nazi.

Me avergüenza mucho que la Paz no sea el objetivo después de experimentar en tantas ocasiones las consecuencias de la guerra. Esta Declaración Universal no es perfecta, ni siquiera es actual después de 75 años, pero era un símbolo respetable que nos hacía pensar en un mundo mejor hacia el que deberíamos conducir todos los esfuerzos posibles porque otro es peor.

La tristeza de este cumpleaños es enorme por la constatación de la inutilidad de Naciones Unidas, una vez más en el presente siglo, al demostrar la inutilidad de los trabajos y las esperanzas internacionales en un mundo mejor.

Mañana, en clase, leeremos la DUDH como si tuviera sentido, como si lo hubiera tenido alguna vez y como si lo fuera a tener próximamente, todavía no he encontrado argumentos para no hacerlo en clase de Valores Éticos, de Filosofía, de Historia, como un hecho humano de la mayor importancia para el mundo. Cuando pregunte después al alumnado adolescente por el artículo que les parezca más importante y me respondan con el número 3, suelen hacerlo cada curso, yo me sumaré a sus argumentos ya que no hay nada más valioso que: Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.

ALFAR PEDRO MERCEDES

 ALFAR CENTRO CUTURAL PEDRO MERCEDES

San Antón, Cuenca


Esta original obra de Julia Calvo nos recibe en el salón de la casa museo del alfarero Pedro Mercedes, en el barrio de San Antón, al que nos invita la guía que realiza la visita guiada por la casa y el taller o alfar.


Cuando acaba la visita y regresamos por dónde hemos empezado, la cartela de la obra inicial no puede ser más oportuna con todo lo vivido en la estancia del alfar. Especialmente fugaz, frágil e inconsistente fueron las ideas del alfarero que acabaron materializándose en su cerámica, también lo fueron todo el tejido social que rodea el trabajo y el lugar del propio museo, desde los animales hasta las vecinas, desde su ayudante hasta su esposa, pero desde luego las circunstancias históricas, aunque supongo que para quienes las vivieron en primera persona la fugacidad no lo sería tanto.

Este espacio artístico, este centro de cultura, ha conseguido ser un lugar necesario y conveniente para la ciudadanía de Cuenca y visitantes. Las gestoras han hecho un trabajo extraordinario. Pronto acabará su contrato, a finales de mes, y el Ayuntamiento debe emprender el proceso de licitara subasta la gestión del Alfar, suponemos que por otro año, o tal vez más. Alguien debería entender que si una cosa funciona tiene que continuar y se debe alentar para que siga funcionando igual o mejor. Los proyectos culturales no son automáticos y su éxito es social por lo que el riesgo de quienes los emprenden es enorme.

Quiero felicitar a Lamosa por su trabajo y sensibilidad y agradecerles su compromiso con la difusión y el conocimiento del arte: ¡¡enhorabuena!!

sábado, 9 de diciembre de 2023

ANATOMÍA DE UNA CAÍDA

 ANATOMÍA DE UNA CAÍDA

Justine Triet, 2023

Con permiso de M. Ligero (https://www.lamarea.com/2023/12/05/cannes-cine-anatomia-de-una-caida-es-casi-perfecta/) es una película redonda. 

Cuando apenas sabemos nada ocurre el hecho que, a fuerza de necesitar explicarlo y entenderlo, marca la trama psicológica, moral, legal y familiar de la película, grabada en un ambiente frío, nevado concretamente, que muestra a personajes fríos cuyas vidas parecen frías creando cierta distancia con el espectador, porque lo que hace que nos interese, que podamos empatizar con los personajes, que sintamos curiosidad y un poco de calor humano, no es la protagonista, en todo momento distante, ambigua, sospechosa, sino el análisis técnico, profesional, laboral, del caso en los tribunales, con su jueza, su fiscal y abogados defensores, sus peritos, su público y su jurado. Además su testigo, clave. Lo que provoca templanza y cercanía es lo burocrático, un juicio, lo alejado de la vida cotidiana que resulta ser lo más humano socialmente hablando, las leyes.

Es una película de argumentos y contrargumentos judiciales, o sea, morales, en los que cada palabra, con su tono de pronunciación y su gesto corporal, deciden la importancia de cada suposición que puede llegar a ser concluyente. Lo subjetivo y las hipótesis protagonizan los discursos para llegar a la verdad objetiva. Es un ejercicio de lógica argumentativa, un juego del lenguaje wittgensteiniano, que va conduciendo la trama por recovecos originales, plausibles, pero también irónicos, inquisitoriales.

La vida de una pareja se exhibe con toda su intimidad y crudeza, los deseos, las pasiones, las frustraciones saltan a la pantalla para contaminar todas las pruebas periciales de posibilidad, de realidad y cambiar los hechos.

Está muy bien contada por los tiempos y las pistas que aparecen separadas para que se pueda conjeturar y descartar. Es muy importante el guion y los planos de la cámara psicológica son decisivos para la implicación con los personajes, para los despistes, para las confusiones necesarias en el cine de suspense, de buenos y malos que no dan la cara a priori, de prejuicios infundados que se deshacen al final y solo al final.

Intriga mantenida perfectamente por el elenco actoral, sobre un plano arquitectónico, literal, en un teatro litúrgico como es la sala del juzgado con sus jerarquías y poderes, que todo lo cuestionan y lo juzgan sin sentencia para que cuente en la sentencia final. Los roles familiares, la sexualidad, el éxito profesional, la crianza, todo se disecciona aparentemente en un segundo término pero acaba siendo definitivo, como lo subliminal. Y con las piezas a punto de encajar en el puzle y cerrar el caso aparece una última que faltaba con la que se hace justicia. Sorpresa final, lo previsible también se enfría.

Muy buena.



jueves, 7 de diciembre de 2023

MICRORRELATOS CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

 MICRORRELATOS CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Sala Iberia, Cuenca, hasta el 10/12/23


La Asociación Cultural Los ojos del Júcar monta esta exposición de microrrelatos a propósito de su II Certamen Internacional con Perspectiva de Género, hasta el próximo domingo en la céntrica Sala Iberia de Cuenca, compuesta por veintiún relatos de los que he seleccionado los que siguen, por diferentes motivos:

El título es de lo más sugerente...

Cuando hay espectadores protagonistas de todo


En ocasiones sucede que...

Todos tenemos manos que podemos usar


Por lógica, una pareja la forman dos personas

El resto son tan necesarios como esta selección, palabras que describen malos tratos hacia las mujeres de todas las edades en distintas situaciones. Algunos son esperanzadores y todos suscitan reflexiones sobre nuestra cultura machista, asesina de mujeres. Hay una denuncia y un llamamiento. La violencia de género nos interpela a toda la sociedad. Hagamos algo cada una/o en su día a día.

Necesaria exposición.



EL CASTIGO

 EL CASTIGO

Matías Bize, 2022

Desde el comienzo se respira con dificultad a pesar de que prácticamente todo sucede al aire libre, en una carretera de una zona boscosa, pero los silencios largos y los planos cortos, el lenguaje no verbal y el verbal del final, componen una orquesta dramática en varias tiempos, a ratos insufribles.

Los dilemas morales se suceden a cada paso, sobre la educación de los hijos, sobre el peso de los miembros de la pareja, sobre la verdad y la mentira, sobre el concepto de familia, en definitiva sobre los actos que realizamos sin libertad, llevados por las circunstancias que eligen otros, que favorecen las normas y lo establecido, lo conveniente.

Según Sócrates es peor cometer injusticias que padecerlas. Ana, la madre en la película, podría ser un buen ejemplo, solo que en el transcurso de la película transita de un extremo a otro, acabando siendo los dos y lo hace en tiempo real respecto al ritmo de la trama y la duración del film. La vemos en un punto de partida y poco a poco se mueve hacia el otro lado, ella misma, la que supuestamente maneja la situación y sabe y decide. Sin embargo las consecuencias de sus actos, por muy calculadas que pudiera tenerlas, no las puede controlar, no las espera, acaban superando su equilibrio mental, corporal, vital. La actriz, en ese recorrido, nos muestra diferentes caras, tonos de voz y expresiones corporales porque va con todo hasta el final, porque se la juega y es consciente.

¿Cuánto hay que permitir a un hijo?, ¿cómo saber cuál es la proporcionalidad exacta de los castigos?, ¿se debe participar de las elecciones del otro aunque no se esté de acuerdo? Cuando la verdad puede acarrear malos entendidos y desencuentros ¿se debe decir?, incluso cuando puede suponer un giro total a las relaciones familiares, un antes y un después dramático para siempre ¿se debe verbalizar lo que se piensa, lo que se viene sintiendo desde hace años?. 

¿La maternidad justifica dejar de ser tú durante el período laboral más importante en la vida de una trabajadora? ¿debe sacrificarse el bienestar personal porque no concuerda con lo que se espera de ti?

Las corrientes éticas de los principios y la de las consecuencias chocan en el dilema que nos presenta la historia, sobre todo porque, como casi siempre, lo que sucede en un momento dado viene de mucho antes y no tiene por qué estar resuelto, o resuelto del todo. Los principios del cuidado, de la verdad, de la empatía, de contar con los demás, sin ponerlos en práctica, sin contextualizar, suelen funcionar, pero cuando se trasladan a hechos concretos pueden dejar de funcionar fácilmente. Entonces las consecuencias toman las riendas y se imponen aunque no se hayan tenido en cuenta.

La interpretación de los protagonistas ayuda a sentir la angustia y a entender la furia de la confesión final. La cultura hegemónica, patriarcal, acaba por ser un ingrediente principal con el que comprender la culpa y el desvelo, la tensión permanente y las reacciones finales. ¿La maternidad justifica dejar de ser tú durante tu período laboral más importante?

Con un planteamiento filosófico claro, tal vez por ello, cuestiona las relaciones personales intrafamiliares, los roles de cada cual, las implicaciones y las renuncias en el día a día, a partir de un hecho puntual, inusual pero perfectamente posible. Además, como añadido, aparece la autoridad civil, los pacos chilenos, marcando claramente lo que se debe hacer en un momento de desesperación máxima, dando órdenes, interrogando y juzgando cada movimiento, cada palabra y casi cada pensamiento. Resulta paradójico el contraste entre sentirse presionados y el paisaje natural, cómo el bosque puede ser la metáfora del interior de cada persona, lo grande y milenario es lo pequeño e individual, de hecho los personajes se internan y salen del bosque como si entraran y salieran de sí mismos, adoptando papeles diferentes de sus prácticas éticas, de su modo de ser y estar con el otro, en el mundo.


miércoles, 6 de diciembre de 2023

CARA DE PAN

 CARA DE PAN

Sara Mesa, Anagrama, 2018


A Lurdes, por la recomendación.

Empiezo a tener algunas pistas del estilo de escribir de Sara Mesa (esta novela es la tercera que leo de ella, en poco más de un mes y mañana salgo a buscar otra...), por cómo construye los personajes y por la propuesta que hace a quienes leemos para encontrar el sentido de la trama.

Algo sucede de pronto, poco a poco presenta a los personajes, al lugar, pero del contexto que explica y hace entender la trama nada de nada hasta bien transcurrido el libro. Por estar escrito así no te queda más remedio que leer y leer. Menos mal que hace una gran separación entre los párrafos para indicar que puedes descansar hasta ahí y retomar a partir de ahí, ya que solo hay dos capítulos y el primero tiene más de 100 páginas.

Casi y Viejo son muy particulares, y a la vez, son como cualquiera. Hacer que los veamos así no es fácil, sin embargo Mesa lo consigue con pocas palabras, las justas y precisas. Hasta el final es austera y fina en la elección de los términos y en los datos que va soltando. Aún así, tenemos que suponer, para eso nos va dirigiendo, la normalidad alrededor, la vida cotidiana como escenario en el que sucede lo extraordinario. Genial. Acabas reconociendo que conoces a varios Viejos y a varias Casis, y a los mundos que los rodean, puede que hasta formes parte de ellos.

Hay una crítica clara de nuestra sociedad respecto a la importancia del cuerpo en la adolescencia, de la edad en las relaciones personales, también de los prejuicios inconscientes que transmitimos sobre la educación, las familias, las terapias. Nuestro afán de tenerlo todo controlado incluye el autocontrol permanente y el control de todas las personas, lo que supone generalizar y eliminar las diferencias para poder ejercer el control más eficazmente. Los personajes secundarios son tan secundarios que apenas son, pero están de manera contundente, con perfiles claros, sin ambigüedades, lo contrario que los protagonistas, escapados de todos los contextos posibles.

Me gusta mucho que uno de los protagonista sepa de pájaros, me recuerda a un par de amigos que aprecio mucho, pajareros ambos, ella viaja al extranjeros para ver frailecillos y él envía datos a las organizaciones científicas de ornitología. Me enseñan muchas cosas y me han contagiado su pasión avícola, por esto, cuando el personaje de la novela cita pájaros y habla de ellos me resulta familiar y cercano, como con la música que cita. Puede que Sara Mesa use estos ingredientes narrativos, tema animales y música, para crear empatías y ambientes reconocibles. Lo consigue.


martes, 5 de diciembre de 2023

THE OLD OAK

 THE OLD OAK

Ken Loach, 2023


La historia transcurre en 2016 y a ratos parece muy antigua. ¿Cómo es posible que siete años parezcan cincuenta? La guerra de Siria y sus refugiados ocurrió casi ayer y ver esta película te lleva, subjetivamente, a un pasado remoto y cuando ya estás allí instalada empiezas a reconocer el presente, los personajes cercanos, la situación urbanística, la despoblación de las zonas rurales, el individualismo extremo, el odio, el caldo de cultivo de una cultura desencantada con la vida y con el intento de vida. Sin embargo, también empiezas a sentir el otro lado, el de la generosidad y la confianza entre personas que no se conocen, el de la solidaridad que entra fácilmente porque ya ha estado ahí en la vida de la generación anterior, el lado del compromiso que surge de la depresión y desesperación.

Otra vez las emociones a flor de piel, siempre surgen de la dimensión social del ser humano. Los egoístas son los malos, los racistas y xenófobos son los malos porque son traidores, desleales, cobardes, mentirosos y abusones, usan la violencia verbal en nombre de derechos ficticios basados en una tradición que solo aporta el tiempo transcurrido, nada de actitudes, nada de hechos, solo el paso del tiempo sin intervenir, sin implicación.

Cuando la historia llega a tu calle en forma de autobús con personas refugiadas de una guerra las cosas no pueden seguir igual, no deben hacerlo. Los personajes que componen la película reflejan muchos errores políticos, religiosos, educativos y económicos que se repiten una y otra vez a lo largo de la historia y lo ancho de la geografía mundial, pero en el medio de tanta desdicha local y foránea, aparece la solidaridad, el reconocimiento del otro como nuestro igual. Personajes abandonados, así mismos o por los demás, sin remedio, cambian y se levantan, aunque solo sea para portar un estandarte de mineros con los emblemas en inglés y en árabe.

El cine social de K. Loach cada vez es más sencillo, lo que no resta dureza ni sensibilidad a las historias y la mirada del cineasta. Ya sabemos que son buenas películas, con esta, además sabemos que son necesarias por su dosis de universalidad. Los ambientes son tan reales que parecen sacados de un documental, ya sean interiores o exteriores, como los planos a modo de testimonios. Es una gran historia muy bien contada.

domingo, 3 de diciembre de 2023

MILLÁS Y LAS DISONANCIAS COGNITIVAS

 MILLÁS Y LAS DISONANCIAS COGNITIVAS



Al pan, pan y al vino, vino, podríamos decir después de escuchar a Millás, un domingo más, con Javier del Pino. Parece mentira que decir lo que vemos y lo que pasa fuera una temeridad y ocultar lo que se ve y lo que pasa fuera lo verdadero y conveniente.

Israel está asesinando al pueblo palestino con el objetivo de acabar con el terrorismo de Hamás y las democracias occidentales, Europa a la cabeza, lo están permitiendo. No hay más maneras de decir estos hechos, de valorar las imágenes que nos muestran en los telediarios. Por esto, Millás se pregunta, y nos interpela, por qué tenemos la extraña sensación de que hay algo que no es como se cuenta, por qué se acepta que Israel se defienda con toda la artillería posible, y no es un eufemismo, y no se le llame asesino cuando masacra a la población civil como lo está haciendo. Una parte de la política española, la derecha para variar, pone el grito en el cielo porque el Presidente del Gobierno dice lo que ve y pide explicaciones, dando a entender que lo hace mal, que nos compromete diplomáticamente y otras vainas con tal de aparentar que ellos lo harían todo mucho mejor porque son mejores. Con independencia de lo mal o bien que haga otras cosas, en este asunto, el Presidente y Millás tienen razón, solo hay que ver cualquier telediario.

Oírle hoy me ha recordado su texto sobre el Caso Nevenka Fernández, subtitulado contra la realidad, allá por el año 2004, lo que nos recuerda que el escritor lleva toda la vida ejerciendo de periodista, buscando la verdad, sospechando de las apariencias, de las palabras, siendo sensible a las disonancias cognitivas, tan utilizadas en nuestros medios de comunicación y en nuestra clase política.

Qué sano es escuchar con tanta naturalidad como lo dice Millás, que las cosas son como las vemos y no como nos las cuentan, que por muy imperfectos que sean nuestros sentidos siempre hay algo que no es como me dicen. Tiene que ser un escritor, especialista en inventar realidades, en construir alternativas imaginativas, quien nos diga a las claras lo que pasa, quien llame a las cosas por su nombre.

Después, el programa ha seguido con el tema de la vivienda y la arquitectura, entre noticias y valoraciones de lo que supone para la vida personal de mucha gente, el actual estado de la vivienda en grandes ciudades y, cada vez más, también en pequeñas. Qué bien sienta un análisis de los datos, una aproximación, siempre subjetiva, de lo que significa en el día a día las cifras y los titulares de las noticias: 600 euros por una habitación en un piso de Lavapiés. 

En fín, otro domingo más, ha sido una suerte escuchar a Millás por la mañana.

sábado, 2 de diciembre de 2023

CUENCA CON EL PUEBLO PALESTINO

 TAMBIÉN EN CUENCA

Manifestación 2/12/23


Esta mañana, en las calles principales de Cuenca, nos hemos manifestado, como en todo el mundo, contra la matanza del pueblo palestino, por el fin de la guerra de Israel contra los gazatíes, por el reconocimiento de un pueblo y su tierra, por la PAZ.

Derrotar a un grupo terrorista no significa masacrar a la población indiscriminadamente. El comportamiento de los israelitas están poniendo de manifiesto que el dinero puede con todo, también con las democracias europeas basadas en unos mínimos derechos humanos que permitimos que se violen permanentemente. 

Resulta irónico que el próximo día 10 de diciembre se conmemore 75 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, un articulado que nació para evitar los genocidios tras las II Guerra Mundial en la que el pueblo judío sufrió hasta lo indecible. 75 años después, el pueblo que se llama judío comete crímenes contra la humanidad hacia el pueblo palestino. ¿Qué Declaración Universal realizará la ONU esta vez?

Entre el frío y el sol, en una ciudad pequeña, hemos manifestado que en nuestro nombre no se asesina a nadie, que sabemos que la paz es posible si se quiere, que Europa puede hacer mucho más de lo que está haciendo y el Estado español también.




CONCHA VELASCO

 ADIÓS CONCHA VELASCO


Así, como la Concha Velasco...esta palabras se las habré oído un millón de veces a mi madre y a mi tía, luego también a mi suegra, para referirse a un peinado, a un vestido, a una postura, a unas palabras, una canción, sobre todo a un estilo que incluye todo un poco. Para las mujeres de mi familia de la generación anterior a mi, la que precede literalmente, la actriz fue un referente completo, algo que probablemente no eligió, no le quedó más remedio que hacer de todo y serlo todo en esos momentos españoles tan adversos y después tan ligados a esa adversidad, que todavía colea...

Creo que muchas personas conocimos la historia de Cruz Roja Española por esta mujer y las demás chicas, en un Madrid que no se veía todos los días pero mostraba ya una gran diversidad social.

La alegría parece que acompañaba siempre a Concha, ya fuera hablando de su carrera o de su vida, aunque le tocó vivir desgracias, como a todo el mundo, aparentó llevarlas con dignidad, como si supiera que iba a seguir siendo un referente toda su vida, dentro y fuera de las pantallas del cine y la televisión, como si cargara con la responsabilidad de representar a un tipo de persona, de mujer, aunque se bajara del escenario después de bailar, qué piernas, o cantar, qué reconocible es su voz, o sencillamente actuar como cómica, en un drama, siendo santa o reina. 

Esta mujer ha sido parte de la historia de mi familia y de nuestro país. Con todo el cariño, adiós Concha!

viernes, 1 de diciembre de 2023

DESDE LA VENTANA...

 DESDE LA VENTANA...


A veces miras y ves esto de la foto, entonces no puedes dejar de mirar hasta que se apaga la luz del sol, hasta que el azul se vuelve negro y la ciudad se distingue porque se encienden las farolas.

Cuántos atributos se le ponen a las ventanas que son cualidades humanas, como indiscreta o cotilla, pero pocas veces hablamos de lo que no es humano y lo percibimos a través de la ventana. De hecho no lo hablamos, con suerte estamos delante y a cada una le muestra una cosa.

El viento invisible se hace notar en los árboles y en las nubes. Hoy era fuerte, tanto que se llevaba hacia la izquierda las pesadas nubes oscuras por abajo y luminosas por arriba, cargadas de agua que no he visto caer, puede que haya caído lejos.

Me gusta permanecer lo suficiente como para captar los grados de luminosidad en los colores, cómo se encienden y cómo se apagan. No siempre puedo mantener la vista el tiempo suficiente y cuando vuelvo a mirar el cambio es brutal, siento el significado del instante plenamente.

Ya no puedo imaginar casas sin ventanas a espacios amplios, abiertos, con cielos que siempre son generosos y distintos, con montes que delimitan horizontes ondulados y árboles que marcan las estaciones. Siempre dejo que pase el paisaje al salón, que se acomode, que inunde la casa antes de cerrar la ventana, unas veces trae luz sola, otras con humedad o con calor, y otras con frío y aire ruidoso.

Todo es más amable mirando desde la ventana.

LA FAMILIA

 LA FAMILIA

Sara Mesa, Anagrama, 2022

La división de los capítulos favorece el conocimiento de los personajes, aunque con los saltos temporales tienes que estar muy atenta a las indicaciones vitales de quien los protagoniza.

Después de leer Un amor, creo que me he acostumbrado al estilo austero de contar historias originales pero creíbles, incluso familiares, como esta, también como aquella.

La portada que presenta Anagrama deja de ser enigmática según avanzas páginas en la lectura de la obra. Puede significar varias cosas, todas aludiendo a un espacio particular, singular, por lo que resulta fácil suponer que sus habitantes también lo son. Lo que no se puede ni sospechar es hasta qué punto y en qué cosas lo son. Padre, Madre, dos hijas y dos hijos. No siempre se narran hechos en los que están todos, a veces faltan algunos porque aún no han nacido o no han llegado, otras porque se marcharon y les pasan cosas a ellos solos, pero siempre hay recuerdos, memoria de lo vivido en la familia, con la familia o directamente alusiones al resto de la familia, ya sea en el colegio o en el aeropuerto.

Me gusta cómo describe los cuerpos, al hacerlo transmite cualidades de la personalidad, aunque sean niños pequeños o señoras mayores con gatitos en el abrigo. El resultado son personajes propuestos contra los estereotipos, rompe los moldes de familia convencional siendo convencionales, en algunos aspectos, a su modo, al modo de esta peculiar familia que podría vivir en el piso debajo del tuyo. Lo que cuenta es que se mueven por el tiempo sin pertenecer del todo a ese tiempo, andan un poco desfasados, descontextualizados pero sintiendo, actuando y creyendo que el resto del mundo es el que está equivocado, es el raro, el que se equivoca. Resulta muy entrañable la presencia de Gandhi como escudo y argumento de seguridad, de firmeza en los principios morales buenos, como guía espiritual ante un  mundo despiadado y cruel con los más débiles.

También me gusta cómo hace crecer a los miembros de la familia, a cada uno. No todos son igualmente tratados en cuanto a extensión y dedicación, pero de todos se puede decir lo esencial y lo que hace que se relacionen entre sí. La jerarquía patriarcal aparece ridiculizada de manera magistral, llevándose consigo maneras de ser mujer, de ser hombre, de ser hija, hijo, maneras de ser joven y adulto que no consiguen existir por la influencia constante, permanente, de unos principios que, sin ser descabellados, son inapropiados. Qué difícil la coherencia cuando se trata de compatibilizar cosas opuestas.

Por supuesto, en toda novela que tenga por protagonista a la familia hay mentiras, dobleces, disimulos, hipocresía y favoritismos, todo en sus grados precisos y momentos concretos, como en toda familia que se precie en la vida real.

Un ingrediente clave es la precisión lingüística, marca de la casa, lo que provoca que quieras seguir leyéndola hasta la última página sin parar. Un auténtico placer.