CARCOMA
Layla Martínez, Amor de madre, 2021
A Sergio, por su poder de convicción.
Está tan imbricada la ficción con la realidad que resulta difícil diferenciarlas. Parece que todo es una metáfora hasta que se cuentan hechos contrastados, tal vez porque todo tiene que ver con las emociones más profundas, las que se heredan y mantiene de generación en generación.
Los pueblos contienen historias de terror que muchas personas conocen pero que las guardan como secretos peligrosos, como algo familiar, propio. Los abusos de todo tipo tienen su lugar y no siempre es visible. La explotación laboral, sexual, la riqueza que se amasa sobre la pobreza del vecino, las envidias fruto de las humillaciones o las normas sociales que colocan en posiciones distintas a las mismas personas, todo esto puede crear un ambiente propio para la violencia extrema, cruel, monstruosa.
Layla Martínez inventa dos voces, dos generaciones, dos mujeres, para contar este cuento de terror con posos de realidad, en el que la santería, brujería o simple superstición juegan un papel fundamental porque las protagonistas viven percibiendo estímulos imposibles, sensaciones paranormales y su comportamiento se ve afectado en todo momento.
Llama la atención el poder que tienen respecto al que dejan de tener los hombres, como si hubiera en la novela una especie de justicia poética hacia la violencia de género y los abusos de poder sobre los más vulnerables.
Reconozco que cuesta hincarle el diente, pero poco a poco, te invita a seguir un hilo, al principio invisible, que contiene intriga, curiosidad y hace que continúes la lectura hasta el final, macabro.
Parece oportuno para las fechas cercanas de halloween en las que se celebra la muerte con humor y golosinas, con sustos o tratos, o con indiferencia por ser importada de otras latitudes comercialmente poderosísimas cuyos tentáculos llegan a las profundidades más inimaginables. En cualquier caso es un libro original que su autora podrá aclararnos de dónde lo saca y por qué en el próximo Festival de novela negra Las Casas Ahorcadas en Cuenca.
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