MOSET ÍNTIMO
Sala Iberia, Cuenca
Hasta el 6 de marzo, en diferentes salas de la ciudad, se muestra una variada obra de Miguel Ángel Moset compuesta de cerámica, pintura, apuntes y decoración. Lo que se puede ver en la Sala Iberia es una maravilla y el espacio contribuye a su disfrute, porque al ser una sala pequeña podemos acercarnos y alejarnos lo suficiente como para que la percepción sea completa y suponga buenas sensaciones artísticas.
Las dimensiones de los óleos invitan a reflexionar sobre lo pintado y a sentirlo, sobre todo los colores y las pinceladas. Te envuelven el amarillo, el naranja, el crema, el ocre, el rosa con sus diferentes tonalidades. Te atraen los verdes, los rojos y los azulones. Acabas comentando con tus acompañantes frases que contienen palabras como bosque, atardecer, agua, movimiento, caída, marcas y límites, unos difusos y otros firmes, hablas de hojas y frutas, de calor y de invierno, de luz y de primavera.
Hay algunas frases debajo de las obras que son pensamientos del autor, aluden a la experiencia artística en primera persona pero también a la que cualquier puede experimentar porque el arte implica diálogo, tanto interior como con los demás. Estos breves textos completan bien a los pinceles llamando provocando esa función del arte que es interpelar a quien mira, suscitarle una reacción.
Se hace obligatoria la visita al resto de los espacios en los que se exhibirán más obras de Moset hasta marzo, Aguirre, Diputación y en Princesa Zaida.
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