YEGUAS EXHAUSTAS

 YEGUAS EXHAUSTAS

Bibiana Collado Cabrera, Pepitas ed. 2023

Hasta que no he empezado las vacaciones no he podido leerlo, y eso que me lo regalaron el 8M pasado...¡regalo más que adecuado para la efeméride! Gracias Jose.

Bibiana Collado escribe como si no escribiera, tan es así que introduce Incisos (4) para dejar constancia de que está escribiendo de verdad, incluso acaba con una conversación consigo misma para aclarar las cosas, tal vez para aclararse las cosas.

Cualquiera que lea esta obra tendrá la sensación de estar delante de quien le cuenta su vida, la de la persona que lee. 

Generalmente, para reseñar un trabajo, se suele contextualizar y enmarcar en el tiempo y en el espacio el contenido y así construir sobre una base que justifique lo que se dice de manera que puede ser entendido por otras personas. Sin embargo aquí, no es necesario contextualizar nada, ni el espacio ni el tiempo hacen falta para decir que esta obra personal es política, es decir, es social, es un ejemplo claro de la situación diaria de muchas personas en nuestra cultura contemporánea. Menciona lo justo los años y los lugares para que podamos agrandarlos hasta contener los que nos representen e identifiquen por edad y geografía. 

Su madre, sus amigos, sus novios, sus médicos, sus recursos, sus músicas, sus trabajos, en definitiva su educación, lo que forma y conforma a las personas, es de quien la lee. Obviamente sin literalidad ni exactitudes, con ciertas traslaciones y extrapolaciones, pero con el suficiente acierto y precisión como para hacerla nuestra.

Analiza la España actual desde uno de los componentes esenciales de cualquier análisis sociológico, cultural o político que se precie, desde la economía doméstica, desde las clases sociales, desde "los de abajo" concretamente. Explora dentro sensaciones, deseos, frustraciones, autoexigencias, culpas, malos tratos, abusos y distancias insalvables que son sociales, que hoy perfectamente podríamos decir "brechas" con cualquier calificativo posterior. Su interior es social, colectivo, común, de clase.

El tema fundamental, acompañado de muchos otros aparentemente secundarios pero claves para el fundamental, es tomar conciencia de ser mujer aquí y ahora, por eso habla de su madre y de ella misma, por eso alude a sus abuelas, hermana y amigas. De ahí también el título tan oportuno con esa foto magnífica en blanco y negro de quien podría ser su madre con compañeras de trabajo.

Para ser consciente escribe. Para ver lo que tienes delante hay que tomar distancia.

No es la primera vez que leemos poesía, novela, teatro o ensayo, en los que el hecho de escribir, la propia escritura forma parte del contenido de las obras, la elección de los personajes, las tramas, la época en la transcurre, todo está ya condicionado por la escritura, por sacar, por dar a conocer, por mostrar, lo que se lleva dentro. Me parece que Bibiana hace un ejercicio difícil con un extraordinario resultado al contar la infancia, adolescencia y madurez de una mujer contemporánea que intenta entenderse evocando episodios de su vida, y en esa selección hay abusos de todo tipo, laborales, sexuales, físicos, psicológicos, sociales, culturales.

Los machismos y micromachismos son cotidianos, tan frecuentes que convivimos con ellos sin darnos cuenta, que los interiorizamos desde la infancia y los naturalizamos sin mayor dificultad. Este es el motivo de tener que escribir para darse cuenta del daño, de la violencia, de la huella corporal y psíquica que deja en las víctimas de por vida. Las experiencias vividas en primera persona, las vividas en tercera persona, las aludidas en notas, van reflejando el estado de nuestra cultura respecto al trato hacia la mitad de la población. Junto a estas experiencias escritas es inevitable añadir las propias de quienes las leemos, las ajenas conocidas por quienes las leemos y las que hemos leído ya. Ella toma conciencia al escribir y procura que nosotras lo hagamos al leerla. Lo consigue.

El estilo directo es el mejor para enseñar. A veces las sutilezas, las metáforas, los rodeos pueden minimizar o confundir. Es de agradecer la claridad de la escritura, la cercanía y la verdad que hay en este libro. Además, el juego de diálogos en páginas grises hace que la parte de ficción no lo sea tanto y la novela pase a ser ensayo, aunque siempre estará la duda de cuánto hay de Bibiana en Beatriz y viceversa. En realidad, no importa, lo que sí es importante es la contundente realidad de los hechos que narra, la verdad de lo que dice el personaje, es tan fácil comprobarlo...tomemos conciencia, tomemos nota y hagamos algo al respecto (la autora lo hace y yo se lo agradezco).

Cuando ha pasado el tiempo, cuando ha rehecho su vida, la protagonista narra su experiencia con anécdotas de todo un país por lo que resulta tan entrañable la lectura, tan deseable continuar hasta el final, un final reconfortante.

CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO: TOLERANCIA CERO