JUEZ, LUGO, MUJERES...INJUSTICIA
Tal vez tenga madre, hermanas, esposa, hijas, sobrinas o nietas. Tal vez en algún momento de sus vidas estas mujeres hayan necesitado hacer pis en la calle por diversas razones que nos pueden surgir a cualquiera. Tal vez una cámara oculta las grabara y Pablo Muñoz Vázquez, un día al mirar su móvil, encontrara el rostro de su familiar, sus genitales, y su cuerpo desnudo en una web, de pornografía o no. Tal vez entonces se plantearía si la intimidad de esa familiar ha de ser respetada.
La Justicia española lleva dándonos ejemplos de machismo mucho tiempo, pero este caso en la actualidad raya lo obsceno. La Fiscalía sí ve delitos, más de uno y él archiva el caso enviando a las víctimas a una situación humillante, por no respetarlas y por indicarles el camino de lo civil si quieren seguir litigando.
Cuando las sentencias son machistas no son justas, las dicte quien las dicte.
En todas las profesiones se exige cierta renovación para ejercer bien, adecuadamente con los cambios de los tiempos, la función que se desempeña. Actualizarse, ponerse al día, democratizarse, son actitudes mínimas que tienen que ser exigidas para mantenerse en la judicatura en pleno siglo XXI. No sólo hay que saber se las leyes sino ejecutarlas bien, de acuerdo con los contextos en los que suceden los posibles delitos, con el rigor que exige el respeto a las posibles víctimas, con la profesionalidad ética de no crear males mayores.
Estamos asistiendo al conocimiento público de cómo jueces en ejercicio cobran ilegalmente clases a estudiantes de oposiciones a juez y a fiscal. Ellos, que han de hacer cumplir la ley se la saltan. Son corruptos, delincuentes, abusadores.
Así la falta de ética parece que existe en buena parte de los jueces españoles, ya sean machistas ya corruptos. Las consecuencias de sus acciones dentro y fuera de los juzgados nos revelan una banda de indeseables que tendrían que estar en la cárcel y no enviando a la gente a ella o impidiendo que entre.
Hay un celo especial con los casos donde las víctimas son mujeres. Desde la sentencia de La Manada en los San Fermines no cabe ninguna duda de la brutal parcialidad ideológica de ciertos magistrados, que hacen de su capa un sayo impunemente, que practican y exhiben un grado obsceno de machismo, insoportable. ¿Hasta cuándo la sociedad española tendrá que seguir sufriendo esta injusticia de la Justicia?
Para seguir conduciendo pasado equis años hay que renovar el carnet. El código de circulación cambia y las cualidades físico-psíquicas personales también. Puede ser un ejemplo de la necesidad de renovación en el ámbito judicial, los códigos jurídicos cambian y las mentes de los jueces no lo hacen.
El Ministerio de Justicia debe renovar la plantilla, el modo de acceso al cuerpo, revisar periódicamente el trabajo de sus miembros y tomar medidas ante actitudes contrarias a los Derechos Humanos, al menos, sobre todo visto lo visto repetidas veces. Basta ya de patriarcado togado!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario