DOS

 DISTANCIAS

La distancia interpersonal indica muchas cosas. En la comunicación no verbal el significado de la posición de los cuerpos que establece una relación, una conversación, es fundamental para entenderse. De hecho, hay distancias para que dichas relaciones se entienda con normalidad o resulten anómalas, ya sucedan en contextos como son el trabajo, las amistades, la familia, los estudios, el ocio o el negocio.

Sin embargo, este elemento fundamental para el buen o mal entendimiento entre personas no existe cuando las relaciones son a través de las pantallas. Toda la información que transmitimos con el cuerpo, consciente o o inconscientemente, no existe y no es sustituida por ninguna otra. El sentido del humor, de la ironía, el sarcasmo, la camaradería, el buen o mal rollo, la empatía o el desprecio, son estados emocionales que solemos expresar con el cuerpo, muchas veces sin palabras. Nuestros gestos hablan, en ocasiones incluso contradicen a nuestras palabras...en definitiva, son imprescindibles para una buena comunicación interpersonal.

El caso es que cada día usamos más la comunicación a distancia, a través de frases cortas, en pantallas, muchas veces sin todas las letras que componen las palabras y acompañadas de simbolitos estandarizados que, necesariamente aumentan cada poco, sustituyendo a los gestos. Estos últimos quedan encasillados en "caritas" totalmente infantiles e impersonales para que cualquiera pueda verse reflejado/a.

¿Qué emoticono representa los 40 centímetros entre mi interlocutor y yo misma, o los 130 centímetros entre un jefe y su empleado, o los 0 centímetros entre una madre y su hija, entre un violador y su víctima...?

La comunicación no sucede en la nada, un elemento fundamental para que ocurra en el contexto imprescindible es la distancia entre quienes hablan, esta enmarca y remarca la misma comunicación.