CONTENEDORES Y ALREDEDORES
En una de las entradas del colegio Fuente del Oro, Cuenca, luce así de colorido, el aparcamiento que sirve de contenedor de contenedores y que hoy, además, contenía el contenido fuera.
No es la primera vez que los contenedores especiales, cuyos contenidos no son desechos diarios, se desbordan. Tal vez la ciudadanía no sabe el calendario de recogida, o no lo puede saber porque nadie ni nada informa sobre esto. Tal vez se pone de acuerdo en los momentos en que saca estas basuras especiales y por eso se acumulan fuera del recipiente lleno. Tal vez lo único que sepamos es lo que vemos y ven otras personas, así, como en la foto.
¿Alguien puede confiar en una tarea de reciclaje y buen uso ecológico de las basuras cuando vemos estos contenedores así por la calle? La confianza tarda en llegar, tienes que hacer todo un ejercicio de realización de hipótesis, más o menos plausibles, más o menos biempensantes, para dejar los aceites, la ropa o los muebles en los lugares dispuestos para ello.
Hoy he pensado que la maestra de ciencias está explicando cómo hacer jabón casero para regalar en navidades, así que las mamás han traído aceite usado de casa, tanto que sobraba mucho, y el alumnado de quinto lo ha sacado en el recreo al contenedor de la puerta.
En los bloques de pisos se acostumbra a poner información relevante para las vecinas y vecinos que habitan el bloque en lugares visibles, en las entradas o incluso en los tablones de anuncios que hay exprofeso. Si el Ayuntamiento enviara información sobre la recogida de estas basuras especiales podríamos evitar saturar los contenedores y acumular basuras en los alrededores de estos, especialmente si están colocados a las puertas de un colegio. Me consta que alguna vez he visto información municipal en la entrada de mi bloque de pisos.
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