miércoles, 23 de octubre de 2019

SOLASTALGIA
Etimológicamente de Solacium: alivio, comodidad y Algia: dolor. Es un coste emocional que sufrimos como consecuencia de la degeneración medioambiental en la que vivimos, el continuo ritmo de producción actual supone un deterioro ecológico tal que notamos malestar ante el estado al que estamos llevando a la naturaleza de la que dependemos y que tanto bien nos causa.

El filósofo australiano Glenn Albrecht en 2003 comenzó a usar este término asociado a la contaminación y explotación de la tierra.

Como somos animales emocionales, me pregunto cuánto tardaremos en contagiarnos esta emoción y cuánto más en responder ante ella. Últimamente vemos cómo en todo el mundo hay conciencia ecologista porque sabemos bien, comprobamos a diario, tenemos certeza del cambio climático y nuestro decisivo papel en él. Si la conciencia no va acompañada de empatía de poco sirve.

También experimentamos cómo resurgen los fascismos con fuerza, esas emociones violentas que encuentran enemigos a cada paso a pesar de tener historia que demuestra lo equivocados que están y lo peligroso que sería que cobraran poder.

La teoría mueve nuestra conciencia.

Las emociones se contagian.

¿Podríamos unir la ecología con la solastalgia para ver qué sucede? Saber y sentir. Debería salir de esta unión algo bueno...solo hay un inconveniente y es el interés porque no se unan. Es ese interés que hay por unir violencia fascista y unidad salvadora, o conciencia verde y capitalismo, ese interés engañoso, que disimula su crueldad maquillado de bondad.

Cambio de intereses. La mayoría tiene la palabra. Pasemos de la economía lineal a la circular...las emociones nos caracterizan como especie, a ver si nos estemos extinguiendo y no nos damos cuenta!!


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