martes, 17 de diciembre de 2019

ACTITUDES QUE PONEN EL MUNDO ALREVÉS
Imagen vuelta donde la tierra está arriba y se caen los árboles en la orilla del río

La brecha que hay entre el mundo rural y el urbano también muestra tolerancia o falta de ella hacia las leyes. La manifestación en apoyo a los condenados del Arandina pone los pelos de punta. Estamos acostumbradas a exigir Justicia las personas que somos víctimas no las personas que son culpables, esto es violadores, maltratadores y abusadores. ¿Cómo interpretar esta anomalía?

Primero puede que no sea una anomalía y lo que llame la atención a un sector de la población sea la desvergüenza con la que se exhibe por las calles. No sería anomalía porque el patriarcado es la actitud mayoritaria, la cultura hegemónica y por lo tanto no es de extrañar que se revele ante la sentencia condenatoria a esta panda de hombres. La novedad es que sea como está siendo. Así que es el modo y no el hecho lo que resulta raro. 

Lo mismo sucede con la suspensión del partido de fútbol del Rayo-Albacete. Nunca antes se había suspendido un partido de casi primera división por insultos racistas, xenófobos, machistas a los jugadores, a los árbitros o las novias, madres e hijos de los jugadores, hasta que el insulto fue la palabra nazi en un campo de un barrio obrero. No imagino la suspensión del Barça-Madrid por gritarla a Piqué separatista, catalanista, antiespañolista o similares...

Estamos sobrepasando todas las líneas rojas de la convivencia pacífica, de la concordia entre la ciudadanía y no parece que haya reacciones que estén a la altura de la gravedad. Me refiero a las condenas de lo que perjudica y a los respetos de lo que conviene.

¿Qué valores estamos enseñando a nuestras hijas e hijos, qué tipo de marco político los permite?







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