domingo, 10 de noviembre de 2019

VOTEMOS

Desde el más puro escepticismo, sin ninguna confianza en el criterio de la mayoría de compatriotas, sabedora de la influencia perjudicial de los medios de comunicación masivos y de la manipulación de las redes sociales, conocedora del poder hipnótico de las soflamas neofascistas, de sus mentiras y sus banderas de boquilla, del peligro de los nacionalismos empecinados en alimentar enfrentamientos, del nivel cultural y del interés general porque no haya nadie de izquierdas con poder en el gobierno. Con el 25% menos de voto por correo y un clima político entre vergonzoso y temeroso. Con un pueblo que no se inmuta ante la resurrecciones del  franquismo, ante la pobreza crónica de millones de españoles, ante la pasividad de Europa que sabe de sobra nuestra historia y la permite, ante una religión católica que enmudece, otorgando así, frente a los crímenes machistas, abusos pederastas, racismos, xenofobias, violencia a menores, homofobias y otros abusos permitiendo el discurso del odio entre sus fieles que son afines a la extrema derecha o al menos esta dice ser cristiana y nadie de la cúpula del cristianismo español lo desmiente.

Desde el escepticismo constatado no puedo hacer otra cosa que votar a la izquierda, la que supone un cierto temblor en las filas del pederasta, del machista, del abusador, del explotador, del corrupto, del mentiroso, del ladrón, del injusto, del franquista, del falso europeista, del empresario de medios masivos, del empresario de redes sociales, de ministros de pseudoeducación, de banqueros con sueldazos y pensionazas, de empresarios de eléctricas, de negacionista del cambio climático, de mantenedores de salarios infames y pensiones insuficientes, de privatizadores y enemigos de lo público.

Desde el escepticismo, con toda la coherencia de que soy capaz, voto a Unidas Podemos porque tengo motivos de sobra para incorporar un poco de política de izquierdas en el gobierno de mi país, en el trabajo y pago impuestos, en el que cumplo las leyes y normas, en el crezco y maduro, en el que me construyo y construyo, en el que soy persona.

Por cierto, hoy en Cuenca brilla el sol, hay algunas nubes y la temperatura es ideal para estrenar abrigo, guantes, botas, bufandas, gorros...el colegio electoral está tan cerca!!

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