lunes, 9 de marzo de 2020

ESPECIALES
Eric Toledano y Olivier Nakache, 2020



Es muy fácil, después de ver esta película, afirmar que todos somos especiales, unos por ser autistas, otros por cuidarlos y otros por hacerse cargos de los unos y los otros anteriores. De los tres tipos de personajes los responsables, libres, son los más importantes, gracias a ellos los otros dos tipos difícilmente conectarían y nada de lo que sucede en realidad sería posible. Me refiero, a la realidad de verdad, porque la película está reflejando el trabajo impagado de las Asociaciones sin ánimo de lucro que se dedican a tratar con personas autistas y sus contextos.

La asistencia estatal es tan ridícula que apenas aparece y cuando aparece hace el ridículo. Un par de inspectores preguntando a los responsables de hospitales y las familias con algún paciente o ser querido autista. Todas las instituciones, y son muchas (hay una escena en la que juegan a adivinar por las siglas cada institución relacionada con personas enfermas marginadas), son inútiles ante la necesaria atención de personas autistas, con sus grados y situaciones personales individuales, especiales.

Cuando ves esta película entiendes mejor la labor de las ONGs. Puedes trasladar el caso a cualquier ámbito social, humanitario, medioambiental, en definitiva, político porque incluye todo lo humano. 

Prestar servicios públicos significa hacerse cargo de todo lo relacionado con el servicio en cuestión, ya sea el agua o la dependencia. No hacerlo equivale a violar las normas, a romper las reglas del juego porque el Estado, por definición, se encarga de lo que los individuos por sí solos no pueden ni deben realizar. No podemos ni debemos curarnos unos a otros, debe haber un persona médica que el Estado mantiene para que nos cure. No podemos ni demos enseñarnos unos a otros, debe haber un apersona maestra que el Estado mantenga para enseñarnos. Así con el resto de servicios públicos, ya digo desde el agua corriente hasta la dependencia personal.

La existencia, el trabajo y el personal de Asociaciones u Organizaciones encargadas de cubrir los servicios que el Estado dice que no puede aunque sea su competencia, han de estar revisadas, inspeccionadas y actualizadas para dar buen servicio y esta tarea ha de ser del propio Estado. Esto hacen los inspectores de la película quienes acaban por resolver el caso de manera "provisional". Genial. No hay nada más permanente que la provisionalidad, al menos en materia de servicios públicos básicos.

Hay que ver la película para vernos como sociedad, como país que progresa, que es democrático, que avanza y que firma acuerdos internacionales sobre Derechos Humanos.

Excepcionales actores y actrices en un asunto valiente, duro y cotidiano.



1 comentario:

  1. "El Renacido"opina que la película es un ejemplo de amistad, compañerismo, de responsabilidad de los enfermos que estan mejor hacia los enfermos que estan peor.El cine frances tiene la cualidad de tratar temas que son un vedadero drama y le da una chispa de humor, para amortiguar el golpe tan fuerte que es la película.Destacar el papel de los monitores que son grandes actores.
    Se puede dar un aire a la de " Campeones", pero en este caso son autistas los protagonistas, con situaciones muy complejas algunos de los enfermos.
    Muy buena película y recomendable, aunque no esta de màs llevarse un pañuelo.

    ResponderEliminar