Era grande, en la foto se ve perfectamente que todo a su alrededor es pequeño. Era muy grande cuando acogió a los Rolling Stones y más tarde a Bruce Springsteen, entre otros grandiosos y apoteósicos grupos musicales.
El Calderón servía de escenario musical a falta de otros lugares para grandes multitudes. Con buenos equipos de música el sonido era decente. El ambiente era ideal, mucho rock and roll!!
Las noches míticas de los conciertos del Calderón no volverán, me quedan los recuerdos musicales en los que aparezco mucho más joven en un Madrid de los años 80. La ciudad cambia a buen ritmo y dentro de poco no reconoceré el barrio, los alrededores porque falta la referencia, el faro que guía la orientación despistada, el campo del Atleti, el Calderón.
La foto, demoledor espectáculo, presenta las ruinas de toda una época, con una parte de mi vida inscrita en ella. La M30, por debajo de las gradas, formaba parte del estadio. Parece una foto de hace mil años y sin embargo mi memoria no tarda en llevarme al césped para bailar, saltar y cantar con gente no suelo ver. Cuántos grupos en cuántas noches!!
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